Dios, Padre misericordioso, te rogamos que atiendas nuestras súplicas por los religiosos de la Provincia Mercedaria de México, para que lleguen a descubrir su misión, vivan y anuncien aquello que te sea grato y te sirvan con fidelidad en el carisma que les has confiado de visitar y liberar a tus hijos.
Te pedimos que derrames tu gracia en cada uno de ellos, e iluminados con la presencia del Espíritu Santo sean dóciles en el discernimiento y actúen conforme a tu voluntad; que sus decisiones y obras sean recibidas por la intercesión de María Santísima de la Merced y nuestro fundador san Pedro Nolasco.
Amén